Entre enero y primeros de marzo de 2006, los madrileños pudimos disfrutar de un "first for Madrid": una gaviota cáspica Larus cachinnans en el vertedero de Pinto.
Acudí al vertedero en tres ocasiones, y la observé tan sólo en una de ellas, el 18 de febrero. El ave en cuestión es un primer año, y saltan a la vista algunas características que la hacen fácilmente identificable, al menos de Larus fuscus.
Lo primero que llama la atención es la tonalidad del plumaje, de un gris lavado, casi blanquecino.
Las terciarias (muy desgastadas, con los raquis a la vista) de un color achocolatado, con bordes claros. el manto es grisáceo, muy claro y lavado, con algunas plumas más marrones con el típico dibujo juvenil de ancla. Las coberteras alares son sorprendentemente blanquecinas, casi sin atisbos de tonos marrones, que sería lo lógico en un ave de primer año. Retiene las primarias, enteramente juveniles. Partes inferiores y pecho blancos, con fino listado marrón a ambos lados del cuello, llegando tenuemente al vientre. Aspecto muy blanco en general.
La forma de la cabeza es también diferente, por su reducido tamaño, esa frente escurrida tan característica de cachinnans. El ojo me pareció oscuro y pequeño. Pico muy ligero, de longitud similar al de las otras grandes gaviotas pero de grosor mucho menor ( yo lo denomino estilo "fragata"). Su color es desigual, con la punta diferente en la mandíbula superior (negra) e inferior (crema), y resto del pico de un color más bien oscuro. Las patas son rosas.
Además de este bimbo, las tres visitas fueron en verdad fructíferas, ya que localizamos varios ejemplares de Larus michahellis (1 adulto y 3 juveniles), al menos 3 Larus melanocephalus y una Larus canus, observada por Juan y que desgraciadamente yo no llegué a ver.
Se leyeron unas 20 anillas de Larus fuscus, de procedencias dispares: holandesas, alemanas, francesas y noruegas.
Por último, un ejemplar de primer invierno de Motacilla alba yarrellii.
Un buen bagaje, tratándose de un paraje a priori tan desagradable como es un vertedero.
Observadores: Juan M. Ruiz y Gabriel Martín.