Vuelvepiedras. Aves del interior peninsular y más allá

Ayer lunes me acerqué a los embalses de

Pedrezuela y Santillana, a seguir controlando el paso postnupcial, que ya empieza a cobrar vida y aporta cosas interesantes.

En Pedrezuela buenas cifras de ardeidos (ver foto), y alguna sorpresa, como un macho de ánade rabudo en eclipse y la gaviota patiamarilla que lleva allí casi un mes.

Espectacular paso de golondrinas (conté unas 250 y me quedo corto), con las primeras lavanderas boyeras peninsulares ya en paso migratorio.

En cuanto a limis, paso curioso: 1 archibebe oscuro, 4 correlimos comunes (3 juvs y 1 adulto schinzii), 2 correlimos menudos (1 adulto nupcial y 1 juv.), 4 andarríos bastardos juv. y la habitual masa de andarríos chicos (+25) y chorlitejos chicos (+ 40). En un próximo post, comentaré las peculiaridades de esos correlimos, que me mantuvieron ocupado un buen rato.

En Santillana, sigue el andarríos bastardo joven en el Samburiel, junto a un tarro canelo algo perdido (ver foto).

8 garcetas comunes parecen haber tomado un sauce muerto como dormidero y reposadero, mientras la orilla buye con decenas de chorlitejos chicos, andarríos chicos y 2 andarríos grandes. La sorpresa vino por parte de 3 patos colorados (2 machos en eclipse y una hembra), que no pude fotografiar porque empezó a llover muy fuerte.

Ya en la rotonda, otra sorpresa! Un bando nutrido de gaviotas sombrías en varios plumajes. Conté más de 300, algo raro por estas fechas. Ninguna anillada, pero entre ellas localicé un adulto de gaviota patiamarilla (en la foto, el ave de la izquierda, de manto más clarito que las fuscus de la derecha)

Los abejarucos sobrevolaban la orilla, un joven del año de alcaudón común desafiaba al equilibrio mirando el sol ponerse(foto)

Y en la lagunita temporal, las golondrinas nublaban el agua, las gaviotas reidoras nadaban perezosamente, y las garzas hacían su "agosto" con las tontorronas carpas del embalse. Ya se ven, por otra parte, los primeros cucharas, fieles a su cita de finales de agosto.

Y yo, mientras tanto, vuelvo feliz a casa. El paso postnupcial ha comenzado en Madrid