viernes, octubre 01, 2010

Unos días en el Fin de la Tierra

Cuando uno se pasa unos maravillosos días en Galicia (siempre suelen ser maravillosos, no es nada nuevo), vuelve a la rutina con una sensación agridulce, como que se deja algo allí. Y más si ha vivido 8 años allí como es mi caso. Es como regresar a casa. Se echa de menos.

Nuestra base de operaciones fue Fisterra, ese final del mundo, meta de peregrinos, un conjunto de playas paradisíacas, buena comida y mejor compañía. En estos días, pudimos acompañar a Fernando Pereiras (el "culpable" de este viaje, mil gracias Fernando), Damián Romai, Xavi Varela, Carmen Mouzo, Xoan y Ruth. ¡Sois todos unos cracks!

Comenzamos el sábado en los aledaños del cabo Touriñán, donde Xabi, Fernando y Damián habían visto  una hora antes nada menos que 6 escribanos lapones Calcarius lapponicus. Tuvimos mala suerte, ya que al llegar a la zona varios turistas los habían espantado. Lapones 1 - Madrileños 0.


El matorral ralo y los arbustos del cabo estaban repletos de vida. Tuvimos varios sustos, pero no nos salió nada raro. Había muchas collalbas grises (foto abajo), pardillos (foto arriba), las omnipresentes tarabillas, colirrojos, etc.



Una pareja de cuervos rondaba el faro de Touriñán, mientras yo perseguía en vano a cualquier pequeño pajarillo que reclamara o echara a volar. Estoy convencido de que una búsqueda continua y más exhaustiva, daría un buen resultado en esta zona.

Queda mucho por patear...

El resto de días los pasamos de playa en playa: Langosteira, Sardiñeiro, Estorbe, Rostro, Lires, Traba, incluso Ponteceso. Ésta última en pleamar, y durante muy breve tiempo. Conseguí sacar una gaviota cáspica  Larus cachinnans de 1cy en la playa de Langosteira, con las primeras luces del alba, pero un  amable dominguero la espantó al poco tiempo, y Fernando Pereiras se la perdió por cuestión de segundos. No fue relocalizada.

Amanecer en la playa Langosteira, Fisterra


Abajo, un Numenius phaeopus.


Y dos agujas colipintas Limosa lapponica



Y una serie de fotos de Calidris alpina juvenil, por Lourdes Martín.




Fernando y yo en plena acción.


Las playas de Fisterra...


Escribano soteño, Emberiza cirlus


Y no puedo resistirme a subir esta foto, con esta carita...

1 comentario:

José Ramón dijo...

Bonito sitio, y bonitas citas.. Un saludo, Gabi